A lo largo de mi vida he tenido varios fracasos, demasiados diría yo, tan simples como
perder dinero que se cae de los bolsillos, tan complicados como haber estudiado una
carrera y no trabajar de ello, no por falta del mismo, sino por mí poca empatía para la parte
práctica.
Para muchos en mi familia eso soy, un fracaso. Algunos me ven con lástima, otros con
esperanza, para otros soy ese motivo de alegría cada que platicó una nueva experiencia,
para otros soy el meme constante.
En ocasiones me he dejado llevar por ese sentimiento de derrota pero siempre he
aprendido a salir adelante. Tan es así, que la frase:
“Al menos no pierde el ánimo”,
debería estar escrita después de mi nombre.
Intento verme desde otra perspectiva y me encuentro totalmente divertida, tal vez, por mi
falta de realismo en lo que me pasa, pero también es sabido fracasar como los grandes,
enlistaré los más raros que recuerdo:
- Al intentar abrir un carro, rompí una llave al girarla, antes de siquiera pensar que era para
el otro lado
- Después de 6 meses sin trabajo, entré a uno, solo para incapacitarme a los 15 dias.
Después de la incapacidad, me dieron de baja. - El trabajo perfecto siempre fue mal pagado y con horas extras.
- Casi soy embaucada cuando mi sueño se empalmó con el de un impostor que sólo
quería hacer fraude. - En ventas, solo logro hacer negocio cuando no hay ganancia.
Una vez llegó a mí la frase: “en el fracaso está tu éxito”, me ha costado asimilarlo, sin
embargo, cada vez retumba más en mi cabeza.
No puedo negar, que tal vez, no es fracaso sino solamente perspectiva. Tengo buenos,
muy buenos momentos, bendiciones enormes que no aplican al libro de “vida exitosa”, pero
dan paz al alma y día a día son el motor para no rendirme.
Mis anécdotas serán sin duda, contadas al lado de los que no se cansaron de intentar, de
los que sonreían en las penas, de los que aprendieron a agradecer lo que se tiene y a no
desear tanto. Al final mi éxito será mi historia.
[…] uno es un objetivo que se pretende cumplir en el lapso de 12 meses o 365 días, aunque algunos ni siquiera llegamos a cumplir los del mes de […]