EL MILAGRO DE LA VIDA
Alguna vez se han preguntado todo lo que tiene que suceder para poder existir, es decir, la complejidad que representamos como ser humano, desde lo espiritual hasta lo corporal, de lo inmaterial a lo material.
Infinidad de procesos tienen que acontecer en nuestro ser para poder despertar un día más, para poder dar el primer pestañeo que nos permitirá captar los primeros rayos de luz solar que entran por nuestra ventana, sentir el frescor o calidez de la mañana, percibir los ruidos de fuera, olisquear el césped recién cortado o el famoso <<petricor>> emanado de la tierra, estirar cada una de nuestras fibras y generar una danza entre los dedos, que junto con nuestras manos, brazos, piernas crean la cinética perfecta, ahora detente.
Sé consciente…
Siente…
Aprecia, lo que no tiene cuerpo…
…aire deslizándose dentro de ti, tus pulmones como esponjas liberadas de la presión.
…hechos que parecen básicos, automáticos, guardados en un baúl, restándoles importancia, pasando desapercibidos, sin los cuales no estaríamos vivos… hechos de vida.
Poniéndonos codiciosos, imaginemos que un día disponemos de 2 pesos, y que a nuestros 30 años esto se haya convertido en 37200000000 billones de pesos, dejadme decir, eres un ente millonario, con tendencia al infinito, pues la misma cantidad de células dispones en tu ser. Comparando la cantidad de días que vivimos, considerando 75 años como edad promedio, da un total de 27375 días. Tendríamos que vivir 101917808 años para igualar la cantidad de células de nuestro cuerpo, ¡¡¿lo imaginas?!! Seríamos entes corpóreos prácticamente I N M O R T A L E S.
“La maquinaria perfecta, cada molécula, cada célula. Disponiéndose en organizaciones para subsistir el humano”
La historia comienza en el dos…
Dos mundos
Dos cuerpos
Dos células
Una historia compartida, olvidada, extraviada en lo más profundo de nuestra mente, en lo más profundo de nuestro ser. Niño, adolescente o adulto. Seas semilla, seas roble.
Nuestro inicio se remonta a uno solo. Aquí comienza tú, mí, nuestra historia. En la destrucción de dos mundos que se encuentran, que chocan, que colisionan juntos, renaciendo en lo inexplicable, en lo enigmático, creando V I D A.
Cual choque cósmico <<a la Big Bang>>, nuestros protagonistas han de aproximarse en este encuentro violento, que los desmaterializa, los mezcla, los une, alcanzando con ello la máxima potencia, la totipotencialidad del ser.
Estallido de amor que crea lo único, lo irrepetible, repleto de divinidad.
Pero vamos a ver, una mujer no produce sus óvulos en la etapa adulta, produce sus óvulos desde el vientre materno y de hecho 2/3 partes de ellos ya no llegan al nacimiento, alrededor de las 22 semana de gestación, una bebé tiene 7 millones de óvulos( igual a llenar el estadio azteca 80 veces) y cuando nace se reduce a 2 millones, para cuando llegamos a la pubertad y comenzamos a menstruar tenemos aproximadamente ½ millón de óvulos, esto quiere decir que 6.5 millones posibilidades de que alguien nazca se van antes de que una mujer entre en su etapa fértil. Ahora imagínate, tú estabas dentro de esos 7 millones y sobreviviste por alguna razón y aun pasaste a estar dentro de los 500,000 óvulos restantes…… eso es como llenar el estadio azteca 6 veces y después de eso tú fuiste el elegido para dar vida a quien hoy eres. Y esto solo es la mitad del camino porque necesitamos a nuestro querido esperma.
Ahora bien, un hombre a diferencia de las mujeres produce esperma durante toda su vida, por cada eyaculación en condiciones adecuadas produce 250 millones de cabezones y en toda una vida una persona produce aproximadamente 525 mil millones.
Hoy en día en la tierra habitamos más de 7 mil millones de personas y para haber tantas personas como espermas en la vida de un hombre deberíamos multiplicar 7 mil millones x 75 o haber 75 tierras más con esa cantidad de habitantes.
Ahora detente ahí y cierra los ojos, trata de imaginar siete planetas más como el nuestro, con 7 mil millones de habitantes cada uno, ahora debes elegir a uno de entre todos ellos y después elegir otra persona de entre 7 millones, es decir después de llenar 80 veces el estadio azteca, tu solo puedes elegir una. Después visualiza a estas dos únicas e irrepetibles personas, ellos tendrían que ser nuestros padres coincidiendo en tiempo y espacio, de la misma manera tus abuelos, tatarabuelos y toda tu línea ancestral, para que tú pudieras ser creado o creador de vida. Dime si no es una locura pensar que tú estés leyendo esto.
Somos un milagro andante, somos magia y las probabilidades de que sucedan las cosas como sucedieron son cero contemplando todo lo que tiene que suceder antes de nuestra llegada a este mundo, es prácticamente imposible dentro de una lógica que tu existas y que haya en algún momento alguien igual a ti y mírate aquí estás leyendo esto.