Para poder llegar al corazón del pueblo, es necesario prepararse de manera concienzuda, poniendo todo el empeño en el arte donde se quiera incursionar. Pero no solo basta con tener la idea de lograrlo, sino de estar dispuesto a poner alma, corazón y vida, en el desarrollo de las habilidades propias, para lograr el reconocimiento y la simpatía de sus admiradores.
Lo anterior suena muy fácil en el papel, pero requiere de una gran disciplina y perseverancia. Y por esa razón muy pocos logran triunfar, porque no han estado dispuestos a pagar el precio.
Es necesario sufrir para darle el alimento que necesitan los sentimientos, y de esa manera poder despertar a ese gigante dormido que se encuentra en nuestro interior. Despertar a la sensibilidad no resulta nada fácil, porque se encuentra muy bien escondida dentro de nuestra conciencia.
Ella no aflora cuando se vive la vida de manera cómoda y conformista, necesita de una buena dosis de adrenalina para hacerse presente y no pasar desapercibida.
Pero existen maneras muy fáciles para pedirle a la sensibilidad que se manifieste en el exterior, y las lágrimas son la llave secreta para abrir ese cofre, tan necesario en el artista para poder trascender.
Puede sonar muy cruel la manera en que llamamos a la sensibilidad, pero no es así, porque ella también puede presentarse cuando en nuestro televisor estamos viendo escenas de mucho dolor entre los protagonistas de una historia de desamor. Y ahí es el momento justo para poder llorar como magdalenas. Pero esto solo se logra si activamos ese chip viviendo y dejándonos envolver, por la trama triste de los personajes principales. Además también contamos con las decepciones en el amor ¿Quién no ha sufrido un descalabro emocional de este tipo? Todos estoy seguro.
Y hasta aquí podemos preguntarnos ¿Como artista se nace o se hace? Más bien podemos desarrollar las habilidades necesarias para convertirnos en ese artista, que necesitamos que emerja en nuestras vidas. Porque todos somos los constructores de nuestro propio destino. Y en realidad vivir una vida de calidad necesita del artista personal de cada uno de nosotros, porque vivir de una manera feliz y placentera, requiere del conocimiento de nuestra misión, ¡Porque vivir es un arte!
Todos traemos insertado en nuestro interior por lo menos un arte para desarrollarlo, por eso existen entre los integrantes de todas las familias, el que hace válida la frase: “de músico, poeta y loco todos tenemos un poco”. Por eso existen los talentos para la música, para ser actriz o actor, para cantar, para componer canciones, para escribir poesía, para escribir libros, por mencionar algunos. Entonces si todos somos artistas ¡Porque vivir es un arte! ¿Por qué tan pocos logran tener un éxito tremendamente avasallador en el mundo?
Esa pregunta puede parecer hasta cierto punto molesta para nuestro ego, porque siempre se encuentra al pendiente de hacernos creer la última coca cola del mundo. La respuesta es muy fácil: porque no todos han descubierto el secreto del éxito. Porque triunfar en la vida es dedicarse en cuerpo y alma a la actividad que más amamos, y cuando lo hacemos entonces el dinero, los lujos, la felicidad, los viajes y los reconocimientos nos llegan por añadidura. Pero debemos de mantenernos humildes y centrados, no dejando que el piso se nos mueva, nada de soberbia y prepotencia, porque no somos más, que nuestros hermanos de vida, sino que hemos encontrado la llave secreta, para abrir nuestro universo de posibilidades.
