Las experiencias Cercanas a la muerte son muy comunes especialmente en personas que tienen alguna crisis por parto, enfermedad o accidentes Cisme Karina nos cuenta su caso, cuándo su hermano muerto impidió que cruzara el túnel.
En esos breves momentos en que la persona se encuentra muy cerca de la muerte su sexto sentido se agudiza y se desprenden de su cuerpo para vivir una experiencia que nunca olvidaran.
A nuestro grupo de Mitos y Leyendas de Monterrey y del Mundo que se encuentra en Facebook nos llegó esta interesante historia, de una madre que estuvo al borde de la muerte mientras le hacían una cesárea para traer a su hijo al mundo, mientras ella daba una nueva vida pasaba al más allá y estuvo a un paso de la muerte. Éste es su relato:
Mi experiencia fue que hace dos años yo estaba embarazada y siempre me vi muy mala, tanto que un día me sentía bien, solo se me salió el tapón mucoso (que es una sustancia generada para cerrar la entrada del útero durante la gestación) empezaron a darme contracciones aunque aún no era tiempo de que naciera mí niño.
Me llevaron a urgencias y llegue con la presión altísima y la glucosa peor, total me internaron y empezaron a prepararme porque mi estado era de muy peligroso, al siguiente día yo ya no desperté, no estaba consciente pero escuchaba todo lo que pasaba a mi alrededor, escuchaba como oprimían el botón de emergencia porque se me subía la presión, yo seguía pero sentí el momento en que me trasladaron al quirófano, alguien iba sentado en mi camilla.
Al momento en que empezaron a hacerme la cesárea me pusieron muchos medicamentos, cables en el pecho, en ese momento yo había cobrado un poco de conocimiento, me sentaron para la raquea, total cuando me estaban abriendo, estaba un doctor y me hablaba mientras me abrían yo empecé a tener mucho sueño, como cansada y no podía respirar bien cuando empecé a escuchar pónganle más medicamento, se nos va.
Así escuchaba al doctor que me operaba y me dijo: hija no te duermas, reacciona, escúchame, abre los ojos, yo no podía abrirlos, me sentía muy mal y sentí que empezó el corredero por todos lados, sentí mi cuerpo frío.
Así siguió y cuando lo sentía más frío ya no escuchaba nada, estaba aturdida y yo vi pasar mi vida entera y a mi hija mayor, cuando de repente empecé a sentir golpes en mi cara y escuche la voz de mi hermano que murió, me decía: gorda despierta ándale despierta, tú todavía no, a ti no te toca morir todavía, regresa, ahí estaba el túnel y al final había una luz.
Cuando estaba por cruzar la luz sentí que mi hermano me estrujo y me gritó despierta, despierta y en eso empecé a despertar y vi que estaban muchos médicos a mi alrededor y observe que alguien traía a mi bebe.
Medio desperté y me mostraron a mi hijo, pero se lo llevaron y yo me desmaye, pero ya era por cansancio, ya no porque estuviera al borde de la muerte y gracias a Dios aquí andamos mí hijo y yo.