Es común escuchar que a los alumnos con autismo se les asigne una maestra sombra en el entorno escolar cuando sus habilidades de integración no están a la par de las de sus compañeros.
El papel de una maestra sombra es apoyar al alumno en las dificultades que presente, ya sea de aprendizaje, cognitivas o de interacción social.
Ésta persona debe estar certificada en pedagogía, especializada en educación especial y entrenamiento en personas con autismo. Sobre todo, conocer el plan de estudios del profesor titular y apegarse a éste lo más que pueda con el alumno.
Por lo general un alumno con autismo no logra estandarizarse del todo en el ambiente escolar, así que jamás el objetivo debe ser normalizarlo, sino motivarlo a realizar las actividades de acuerdo a su contexto, ritmo y entendimiento.
Antes de asignar una maestra sombra se debe evaluar si el alumno es capaz de moverse en el ambiente con otras intervenciones, como lo puede ser adaptaciones curriculares y material gráfico de apoyo. Sobre todo, entender que entre más alumnos y estímulos existan, mayor será el esfuerzo que deba hacer.
No siempre el problema es en el salón de clases, recuerdo a mi hijo Axel en jardín de niños, su Neuropediatra evaluó que podía estar en una escuela regular, y no tenía problemas de aprendizaje, pero no entendía por qué debía hacer honores a la bandera, y en el recreo jugaba solo, no interactuaba con otros niños, aunque se le acercaban, no les hacía caso.
A pesar de sus limitaciones de lenguaje, se hacía entender con la maestra y señalaba lo que quería o le pasaba, si comprendía quien era la autoridad, no tenía problemas de conducta, simplemente en campo abierto él solo quería correr y le costaba permanecer quieto.
Una maestra sombra fue la solución, tal vez que alguien le explicara de manera más detenida las dinámicas fuera del salón de clase lo ayudo a integrarse. Dejo de ignorar a sus compañeros y comenzó a jugar con ellos a pesar de no tener lenguaje, al cabo de un mes ya jugaba lo de otros niños.
Se debe recordar que el alumno con autismo no siempre tiene problemas de aprendizaje, no confundir falta de atención con falta de interés, y sobre todo la literalidad con la que comprenden el mundo, por lo que es necesario explicarles de manera personalizada algunos aspectos ya que en forma grupal es más complejo procesar para ellos.
En escuelas de educación especial existen los maestros de apoyo y niñeras, que más que atención al avance del alumno es ayuda para el profesor frente a grupo para no entretenerse con el más rezagado en autocuidado, aprendizaje y conductas disruptivas.
Una maestra sombra está encaminada a que el alumno avance y en algún momento ya dejarlo solo porque alcanzó los objetivos, una niñera le puede lavar todos los días las manos al alumno y llevar 20 años en esa escuela especial y nunca aprendió a asearse por sí mismo; y dependerá del apoyo eternamente.
Es importante que aceptes la realidad de tu hijo, si aún no está capacitado para un aula escolar, si puede lastimar a alguien más o es auto lesivo, es necesario un entrenamiento previo antes de enlistarlo en la escuela; ante la desesperación de insertarlo al mundo escolar los envían a educación especial y a veces ahí se estancan porque no existe el personal que los ayude a avanzar, simplemente se dedican a cuidarlos como una especie de guardería.
El autismo es un espectro donde el individuo se mueve y avanza, si es motivado y le proporcionan las herramientas de acuerdo a su caso, no es lo mismo para todos, por eso se debe buscar un centro escolar que entienda esto y tenga las aptitudes para trabajar arduamente con tu hijo.
Con mi experiencia no estoy diciendo que una escuela regular es la indicada, o la especial no le ayude; solo platico con lo que me encontré, tu como madre o padre debes buscar e interrogar a las autoridades escolares y después elegir.
Yo tuve dos experiencias, una donde tuvo unos meses maestra sombra fuera del salón con mi hijo el mayor y con el más pequeño tuvo un entrenamiento previo por presentar conductas disruptivas y hasta los siete años ingresó a preescolar a mitad del ciclo; y sobre la marcha se regularizó, en un aula con pocos alumnos, y eso fue lo mejor a que lo hubiéramos obligado a estar en una escuela regular con mucha gente y sin poder estar él ahí y sin poder hacer algo las maestras por él.
Siempre debes evaluar y elegir lo mejor para el alumno, no lo mas cómodo para ti, mucho menos el que dirán. Que nunca te pesen los comentarios de amigos y familiares cuando presumen a sus hijos, el tuyo tiene autismo, pero es maravilloso y con las estrategias personalizadas te lo demostrará.
Los apoyos tanto de maestra sombra como de adecuaciones escolares, los solicita el director de la escuela a la Secretaría de Educación Pública estatal al departamento de educación especial, donde un equipo técnico conformado por Psicólogo, terapeuta de lenguaje y profesor de regularización evaluará que es lo mejor para el alumno. En educación pública en México son gratuitos estos servicios, defiende los derechos de tu hijo; ya si tu elijes pagar a un particular es tu elección.
El entrenamiento previo de un alumno con autismo para ingresar al aula escolar por presentar conductas disruptivas, es en un centro de atención al autismo y debe tener un Psicólogo responsable especialista en el área. Generalmente son particulares o hay algunos subsidiados por fundaciones y podría no tener costo la rehabilitación de tu hijo.
Probablemente primero lo atiendan individualmente y después lo integren a una especie de saloncito con otros tres compañeros para que aprenda las dinámicas de un aula escolar, pide a tu Paidopsiquiatra que te envíe a un centro donde lo atiendan bien, porque de charlatanes que atienden el autismo está llena la ciudad.
Jamás te des por vencido respecto a la atención que requiere tu hijo, mi agradecimiento a aquellos profesores que reciben a niños con autismo con entusiasmo para aprender de ellos y abrazos a esas maestras sombra, su paciencia y dedicación es lo que las distingue.
Autor: Mariposa Monarca, mujer con autismo que tiene dos hijos con autismo.