De repente desperté dentro de un vientre materno, solo soy un espíritu, un alma desconcertada. En este momento recuerdo muy bien cuando me encontraba en el cielo, después de haber analizado mi vida entera, finalizando con este análisis, hace escasos diez días, aunque el espacio tiempo no existe en esa dimensión, pero la menciono para que se entienda mi relato.
Regresé del planeta tierra hacia el cielo, después de haber tenido unas experiencias dolorosas con mis padres, las cuales me dejaron un extraordinario aprendizaje.
Trato de comunicarme con mis guías espirituales en el cielo, pero no me responden. Necesito explicaciones, porque todavía no había decidido regresar a la tierra, porque no estaba preparado para hacerlo, y necesito regresar para que me expliquen, por qué no me dejaron escoger a mis padres, cuando así es el procedimiento celestial para poder regresar a la tierra.
Puedo ver a mi madre en el mundo externo, quien es una ejecutiva exitosa en una empresa de publicidad, siendo la Directora General, con demasiada carga de trabajo, lo cual le impide ser madre en este momento.
Eso no está dentro de sus planes inmediatos, porque en su escala de valores, primero es su trabajo y después su vida personal. Ella no se imagina que yo me encuentro aquí dentro de ella, iniciando con la formación de su primogénito no deseado.
Anoche tuvo un encuentro pasional con su pareja, y se le olvidó tomar la pastilla anticonceptiva, por esa razón aquí estoy con ella, tratando de encontrar explicaciones de mis mentores del cielo.
Cristina se siente un poco extraña, en ese día, no alcanzando a comprender los motivos. Y obviamente no pasa por su mente, el olvido de tomarse la pastilla, por la poca frecuencia con la que ocurren las relaciones sexuales con Germán, su pareja.
Es extraño como al momento de la fecundación del óvulo, yo fui arrancado del cielo de manera inmediata y sin mi autorización. Porque hasta donde recuerdo mi vecino de allá arriba, es quien ya estaba listo para regresar a la tierra, pero yo ni siquiera lo había imaginado todavía.
Por fin al tercer día de estarlo intentando, pude tener comunicación con mi guía espiritual, quien me pidió disculpas por el error cometido, prometiendo arreglar el problema lo más rápido posible. Pero pasaron las semanas hasta el momento, donde Cristina estando en una reunión con los publicistas de la revista, tuvo que salir apresuradamente hasta el baño, para comenzar con los síntomas de su embarazo: vomitando abundantemente en la taza del baño.
Regresó a la reunión de negocios terminando su exposición, donde se pudo apreciar el gran éxito de la empresa en relación con las ventas, y las gestiones erróneas de la competencia, quienes no han podido contender de manera decorosa con su empresa.
En todo este tiempo he tratado de comunicarme nuevamente con mi guía, no obteniendo respuesta, razón por la cual entro en un periodo de desesperación, provocando muchos malestares a mi madre, por no encontrarme a gusto con mi periodo de gestación.
Estoy siendo fiel testigo de cómo poco a poco, mi cuerpo se está formando, nunca en mis otras vidas se me había dado la oportunidad de manera consciente, en cuanto al disfrute de estos momentos de exquisita belleza.
Pero no estoy de acuerdo de estar aquí, porque todo ha sido dado sin mi consentimiento, volviéndome un poco rebelde, con esa decisión espiritual.
Después de muchos mareos y vómitos de mi madre, por fin decide ir con el médico, quien la manda a realizar estudios clínicos, como soporte a sus síntomas presentados hasta ahora. Y a los dos días regresa Cristina donde se le comunica de su embarazo, no estando de acuerdo con el mismo, porque eso no estaba dentro de sus planes.
Se lo comenta a Germán y deciden no tenerme, buscando a una especialista en abortos. Hasta ese momento veo la magnitud de mi problema, porque eso no estaba dentro de mis planes.
En mi vida anterior fui un niño no deseado, y ahora sería solo un intento de niño, porque mis padres decidieron no tenerme, como queriendo cumplir mi deseo, de pronto regresar hacia el cielo. Pero yo no estoy de acuerdo de regresar así de esa manera, porque no se me hace justo.
Esa noche trato de comunicarme con mi mamá en sueños, prometiéndole ser un niño modelo, si ella me da la oportunidad de vivir. Ella se resiste con todas sus fuerzas, pero al fin lo logro, presentándome como un niño con un extraordinario parecido con su padre, a quien ella ama con toda su alma, me ve como su más bello retrato, y sobre todo me ve jugando con mi abuelo disfrutando de lindos momentos.
Ese sueño cambia su idea del aborto, por el deseo ferviente de convertirse en madre. Lo cual me llena de gran felicidad, por haber logrado influir en ella. Aunque esa noche recibo la visita espiritual de mi guía del cielo, quien trae a mi reemplazo, lo cual me llena de infinita tristeza, porque ya no quiero irme, solo deseo nacer para disfrutar de mi linda familia.
Pero ya no puedo hacer nada para quedarme, yéndome muy triste. Y desde allá observo a Cristina, como sufre un terrible accidente automovilístico, perdiendo a su bebé y destrozándome el corazón.
Y reclamándole a mi guía espiritual sobre tal acontecimiento. Pero él guardando silencio, apela a mí comprensión. Porque eso me faltaba vivir, solo eso, para poder quedarme para siempre en el cielo. Y a mí me toca recibir al espíritu de ese bebé, convirtiéndome en ese guía espiritual, que tanto necesita para poder trascender, como yo lo estoy haciendo ya, en este momento.