Esta vez vamos a tratar de comprender lo que la palabra “libertad” representa, no creo que sea posible definirla concretamente ya que es un concepto meramente subjetivo. La RAE intenta generalizar esta idea describiéndola como: “f. Facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos” pero si nos vamos al sentido más estricto de la palabra cuando la RAE habla de “es responsable de sus actos” está coartando la libertad real total ya que una responsabilidad siempre será una limitante para nuestras futuras decisiones y, si seguimos sobre esta línea, la libertad absoluta está limitada por la propia existencia ya que nos tiene condicionados a ciertos parámetros para conservar la misma. En resumen, el concepto de libertad total o absoluta es irreal en el sentido más estricto de la palabra.
Después de hablar de lo que no es la libertad intentemos identificar lo que sí podría ser.
Uno de nuestros primeros intentos de definir la libertad fue en la época medieval cuando las personas se empezaban a cuestionar el cómo y el por qué de sus acciones y la relación directa que estas tenían con lo que se inculcaba en las iglesias, quizá a modo de código de comportamiento social para una sana convivencia o a modo de control autoritario de las masas, se llegó a la creación del concepto de “libre albedrío” el cual, básicamente, dice que las personas tienen el poder de elegir y tomar sus propias decisiones con una obvia carga directa a sus creencias –eres libre de hacer y de tomar la decisión que quieras pero si no haces lo que te decimos, más allá de las consecuencias legales, tu alma inmortal estará condenada al infierno y a un sufrimiento eterno- (…).
Me gusta más pensar que podemos tratar de delimitar la libertad vertiéndola en tres esferas diferentes donde se desglosa el espectro de posibilidades que tenemos de acuerdo a la condición en que nos encontramos. La primera sería la esfera nuestra condición biológica y nuestras limitaciones físicas, la segunda encierra nuestra creatividad y conocimientos, la tercera y última esfera es la acción humana y la sociedad.
Me explico con los siguientes simples ejemplos:
- Condición biológica y limitaciones físicas: En el supuesto de que mi condición física fuera grandiosa, si voy caminando por la calle y quiero dar un simple salto soy perfectamente libre y capaz de hacerlo y lograrlo, pero si trato de hacerlo para subir a una casa sencillamente no podré y no por el hecho de que no sea libre de intentarlo sino porque es imposible sin el apoyo de una escalera o de algún otro tipo de ayuda. Por más que me esfuerce jamás podré llegar de un solo salto, desde el suelo, a la cima de una casa.
- Creatividad y conocimientos: Se dice que nuestra mente no tiene limitaciones pero no podemos opinar objetivamente sobre un tema del cual no tenemos conocimiento, nunca estaremos relativamente cerca de poseer ni una millonésima parte del conocimiento total existente de cualquier cosa porque el conocimiento siempre se actualiza y va creciendo, va cambiando y evolucionando; podemos ser tan fantasiosos o creativos como creamos serlo pero no somos capaces de imaginar un nuevo color.
- Acción humana y sociedad: En nuestra sociedad existen leyes y prohibiciones que debemos acatar o nos haremos acreedores a algún tipo de sanción, eres libre, físicamente hablando, de darle un puñetazo a otra persona pero seguramente si le llaman a las autoridades te van a llevar por no respetar estas restricciones. Mi libertad de agitar el puño en el aire termina donde empieza la nariz de otro.
En resumen, la libertad es un tema increíblemente extenso y no podemos definirlo o delimitarlo en su totalidad, pero mi mejor intento de esto sería decir que la libertad es un acto y no una posesión.