La leyenda del Santo, el enmascarado de plata, el ícono más querido y apreciado de la lucha libre mexicana y del cine de terror.
Está basada en la vida y la obra del mexicano Rodolfo Guzmán Huerta, un luchador profesional y actor que nació en la ciudad de Tulancingo, Hidalgo, el 23 de septiembre de 1917. Desde joven se interesó por la lucha libre y debutó en los años 30 con varios nombres, como Rudy Guzmán, El Hombre Rojo o El Murciélago Enmascarado II.
Fue en el año de 1942 cuando adoptó el nombre de El Santo y se puso una máscara plateada que nunca se quitó en público, creando así un gran misterio y una identidad que lo acompañarían hasta su muerte.
El Santo se convirtió en un héroe popular y un símbolo de la justicia para las personas, ya que su personaje trascendió el ámbito de la lucha libre y se transformó en un superhéroe que luchaba contra el mal en diversos medios masivos.
Su primera aparición fue en una historieta semanal que se publicó desde 1952 y que llegó a vender miles, tal vez millones de ejemplares. Su éxito fue tal que dio el salto al cine en 1958, protagonizando 52 películas en las que enfrentaba a todo tipo de villanos, como: vampiros, momias, zombis, extraterrestres o nazis. Sus películas fueron un éxito de taquilla no solo en México, sino en gran parte de América Latina, Europa y algunos lugares tan distantes como Líbano o Turquía.
Estas son algunas de las mejores y más taquilleras de sus películas:
- Su primera película fue: “El Santo contra el Cerebro del Mal”.
- Santo contra las Mujeres Vampiro.
- Operación 67.
- Santo contra las momias de Guanajuato.
- Santo contra el Dr. Muerte.
- La última de sus películas fue Santo en la furia de los Karatecas en 1981 con el también luchador Tinieblas. Estas películas catapultaron el éxito y la imagen del El Santo a nivel mundial y son consideradas unas joyas del cine mexicano.
El enmascarado de plata también participó en programas de radio, televisión, teatro y circo, siempre manteniendo su máscara y su impactante carisma que atraía a la gente como la miel a las moscas.
Su popularidad era tal que recibió varios reconocimientos y homenajes, como una estatua en su ciudad natal, una calle con su nombre en Ciudad Juárez o una exposición permanente en el Museo del Niño de México y su figura puede verse en varios museos de cera. Además, inspiró a generaciones de luchadores y artistas que siguieron su ejemplo y su estilo.
El Santo murió el 5 de febrero de 1984, a los 66 años, a causa de un infarto agudo de miocardio. Poco antes de morir, se quitó la máscara por primera y única vez en un programa de televisión, revelando su rostro al mundo. Su funeral fue multitudinario y emotivo, con miles de personas que le rindieron tributo. Fue sepultado con su máscara puesta, como él mismo lo había pedido.
La leyenda del Santo sigue viva hasta nuestros días, gracias a su legado cultural y a su hijo Jorge Guzmán Rodríguez, quien siguió sus pasos como luchador bajo el nombre de El Hijo del Santo. El Santo es considerado como uno de los máximos representantes de la cultura mexicana y uno de los más grandes de la lucha libre mundial.
Bibliografía:
El Santo – Wikipedia, la enciclopedia libre
La Biografía del Santo el Enmascarado de Plata y Leyenda de México
El Santo: La leyenda del Enmascarado de Plata