Algunas sociedades han sido amantes de los gatos y desde la antigüedad los veneraban en sus hogares y los usaban para cuidar sus templos creándose así historias que se pasaron de boca en boca hasta convertirse en leyendas, tal es el caso del gato siamés.
El gato siamés es originario del Reino de Siam, el cual paso a llamarse Tailandia, el 23 de junio de 1939.
En la antigüedad eran los Reyes quienes tenían el privilegio de convivir con este tipo de gatos que por ser de Siam, se les llamó siameses.
En un templo Budista llamado Wat Brown en Bangok, Tailandia fue encontrado el libro de los gatos Tamara Maew que se cree fue escrito entre los años de 1350 y 1767 en Ayudha, la antigua capital de Siam.
En el libro se muestra el amor y veneración mística que les tenían a los gatos, ellos adoraban a todos los felinos y uno de ellos era el siamés y en un poema dedicado a ellos se leía:
“Los gatos de estas 17 cualidades deben ser buscados.
Te traerán honor y prosperidad.
Te harán más y más rico si mantienes a alguno de los
gatos con estas cualidades”.
Actualmente estos mininos de origen asiático viven en todas partes del mundo, pero veamos algunos de los relatos que han pasado de generación en generación:
Una de las leyendas cuenta que el Rey de Siam envió a 2 gatos siameses a buscar una copa de oro del Buda y cuando la encontraron, uno de ellos se fue rápido a buscar al monarca, mientras que el otro se quedó observando detenidamente la copa y sosteniéndola con la punta de su cola.
Después de que el Rey llegó se dio cuenta que la punta de la cola del felino estaba torcida y los ojos del gato estaban bizcos y a partir de ahí estas fueron dos de las características que distinguen a esos gatos tocados por la energía del Buda.
La otra leyenda que se conoce la llamaremos: “El siamés del Rey”.
Cuentan que en la antigüedad en el Reino de Siam los monarcas eran los únicos que poseían gatos siameses y cuando fallecía un rey, su alma podía ser contenida en el cuerpo de un siamés.
El ritual que se realizaba era incluir al gato en los aposentos del Rey en sus últimos momentos de vida, para que al morir su alma se trasladara en el siamés antes de ascender al cielo.
Cuenta la leyenda que al fundirse el alma del Rey con la del gato, éste podía asistir a la coronación de su sucesor.
Así el micifuz seleccionado para ser el receptáculo del alma del Rey pasaba cada día del resto de su vida lleno de lujos que proporcionaban los familiares del fallecido y los llevaban a los templos a vivir entre los monjes y sacerdotes.
Otro de los mitos que existen alrededor de éstos felinos es el que explica porque desarrollaron torceduras en la cola y es porque mantenían los anillos de las princesas en sus colas, con la finalidad de que no se cayeran.
Así también se afirma que el significado espiritual del gato siamés es de buena suerte ya que la leyenda cuenta que estos felinos era una raza reservada solo para la realeza siamesa y el ciudadano común no podía ser dueño de ninguno a menos que el mismo Rey se lo regalara.
Se consideraba este gesto del Rey un gesto espiritual muy importante ya que los consideraban animales puros y sagrados y siempre ha estado ligado a la buena suerte en la cultura oriental.
En Tailandia, quienes son los herederos del Reino de Siam existe una tradición de dar un gato como regalo al inaugurar una casa como símbolo de abundancia, buena suerte y que se desea que el hogar sea estable.
Bibliografía
Siameses: la leyenda de los gatos de Tailandia – XIAHPOP
¿Qué significa tener un gato siamés? – El Gato Siamés (elgatosiames.com)
