Esta leyenda del enfermero de la muerte, el mayor asesino en serie de Alemania de la posguerra, fue acusado de asesinar bebés con insulina es un caso real, que ocurrió en 2019.
El enfermero Niels Högel, de 42 años de edad, fue condenado por matar a 85 pacientes entre bebés y adultos con sobredosis de sustancias toxicas, que bajaban el nivel de azúcar en la sangre o aceleraban el ritmo cardiaco.
En sus declaraciones a la policía Högel dijo que actuaba por aburrimiento o por el deseo de demostrar sus habilidades para reanimar a las víctimas, cuando estas caían en coma.
Högel trabajaba en dos hospitales del norte de Alemania, en Oldenburg y Delmenhorst, entre 2000 y 2005. Durante ese tiempo, inyectaba tóxicos a sus pacientes sin motivo médico alguno, provocando que entraran en coma o sufrieran paros cardíacos.
Luego, intentaba reanimarlos para impresionar a sus colegas o para evitar sospechas. Sin embargo, muchos de ellos no resistían y morían por las complicaciones derivadas de la insulina.
El macabro enfermero fue descubierto en el año 2005, cuando una practicante médica lo sorprendió inyectando insulina a un paciente que no la necesitaba. Fue detenido y juzgado por varios casos de asesinato e intento de homicidio.
En el 2008, fue condenado a 7 años y medio de prisión por un asesinato y cuatro intentos de asesinato. En 2015, fue condenado a cadena perpetua por otros seis asesinatos y dos intentos de homicidio.
Sin embargo, las investigaciones posteriores revelaron que el número de víctimas era mucho mayor. La policía exhumó más de 130 cadáveres de los hospitales donde trabajó Högel y analizó sus restos.
También interrogó a testigos y revisó los registros médicos. Así, se determinó que Högel era responsable de al menos 85 muertes, aunque se sospecha que podrían ser más de 200.
El enfermero asesino confesó algunos de los crímenes, pero negó otros. Dijo que actuaba por aburrimiento o por el deseo de demostrar sus habilidades para reanimar a los pacientes. Se calcula que terminó con la vida de alrededor de 300 de sus pacientes.
Dijo también, que se sentía arrepentido y que quería pedir perdón a las familias de las víctimas. Sin embargo, el tribunal lo consideró un mentiroso y un manipulador, que actuaba por egoísmo y crueldad. Era un verdadero Psicópata. Högel fue condenado en varios juicios y mientras salían más cadáveres se le aumentaba la pena hasta llegar a la cadena perpetua por 300 asesinatos en 2019, en lo que se considera el mayor caso de asesinato en serie en la historia de Alemania.
Además, el caso provocó una gran indignación y una profunda revisión del sistema sanitario alemán, para evitar que se repitan casos similares.
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Bibliografía:
La historia del enfermero alemán Niels Högel, quien asesinaba a sus pacientes disfrazado de “resucitador” | Alemania | RMMN | HISTORIAS | MAG. (elcomercio.pe)
Caso Niels Högel: el «enfermero de la muerte» de Alemania: ¿cómo pasa un cuidador a ser un asesino en serie? – BBC News Mundo
