La Casa de los Tubos
leyenda de terror, miedo y muerte.
Cuenta la gente de accidentes y
extrañas muertes durante su construcción
que por muchos años inconclusa quedo.
Un padre amoroso construía la casa
sin escaleras, sólo rampas,
para que su hija en silla de ruedas
pudiera movilizarse libremente.
La residencia conocida cómo
La Casa de los Tubos
sería el regalo perfecto
en la próxima boda de la joven
que parecía niña encantadora,
sin darse cuenta que la tragedia
deambulaba en el ambiente.
Un día fueron a ver los avances
de la casa que se encuentra ubicada
en las faldas del Cerro de la Silla
al sur de Monterrey, Nuevo León.
A lo lejos las columnas parecen tubos
y así como la casa de los tubos se le conoció.
Todo era alegría y emoción,
Bastó solo un momento para que la muerte se hiciera presente
en un descuido o tal vez una fuerza sobrenatural
quitó el freno de la silla,
cómo si del más allá dirigieran su camino
desde lo alto de la rampa
fue a caer a la ventana
Que sin vidrio aún estaba.
El joven cuerpo de la mujer niña
salió disparado a un cruel destino
al caer por el precipicio, se escuchó un grito
ayúdame, pero el papá ya no pudo hacer nada.
Abajo en el barranco
la muerte con los brazos abiertos la esperaba.
El grito desgarrador del asustado padre
que nunca pudo perdonarse tal descuido;
el llanto interminable de la madre
que sufre depresión inconsolable,
que con el tiempo la lleva
a una extraña muerte, inmutable.
Casa maldita te llevaste a la niña
Y de paso cargaste con su madre
Dicen que por las noches
deambulan sus fantasmas por pasillos
esperando encontrarse con su padre.
Un horrible destino
de una hija, de una madre
muchos años pasaron ya
se habla de trágicos accidentes
de almas en pena que espantan
a los albañiles que quieren terminarla.
El tiempo pasa,
los fantasmas agotados…lLa casa vendida, remodelada…
limpias y sacerdotes, investigadores y paranormales
que quieren normalizar la enorme residencia
y por quienes piden benevolencia.
Pero nadie sabe que nuevas historias
pueden escribirse y si las almas en pena
iban incluidas con la venta de la casa
para acompañar a los nuevos inquilinos
en la nueva casa de los tubos.