A lo largo de los años recientes hemos visto cómo se desarrolla esta batalla. La tecnología y sus múltiples aplicaciones ha permitido que los ebooks nos acerquen fácilmente a la literatura.
Por este motivo es que los libros en papel han terminado siendo segunda opción, por aquellos lectores que tienen los recursos para obtener digitalmente las obras de los autores. No obstante, se convierte en una problemática para las personas que no disponen de internet. Existen comunidades que se localizan lejos de la urbanización, donde la tecnología no es algo cotidiano.
Es en esos lugares donde tenemos que difundir la importancia que tiene un libro en papel y difundir las obras que difícilmente llegan a todo el mundo.
La lectura como medio de información
La lectura es fundamental para abrir horizontes mentales. Es una manera de fomentar la imaginación y encontrar aprendizaje a través de las letras. Vivencias o historias relatadas o simplemente un contexto de información que podemos ocupar en algún momento de nuestra vida.
No hablo de que hagamos a un lado los ebooks como fuentes de información, sino que mantengamos un control de consumo y apoyemos a otros.
Existen otras personas que, independientemente de las posibilidades económicas, por salud no deben de estar por lapsos largos de tiempo mirando las pantallas de los smartphones o computadoras, ya que el brillo de tales le perjudica a su sentido de la vista. Por esto, es que optan por adquirir libros en papel para degustar de la lectura en sus hogares o lugares de estancia.
Los ebooks son una buena manera de promocionar la literatura a nivel mundial, porque en la mayoría de los países se tiene acceso a internet. Se debe hacer hincapié en utilizar la tecnología como herramienta no solo como un ocio y diversión.
No nos confiemos, esta tecnología, en un futuro no muy lejano, terminará como primer lugar como distribuidor de lo contemporáneo.
Más que una guerra, debería de ser una alianza. Una alianza entre dos mundos diferentes: digital y análogo, pero con un solo objetivo y propósito, el de compartir la información a todos los rincones de la tierra. Formar un equipo en el cual, se divida la promoción, distribución, monetización y acceso a los libros, como herramientas de trabajo continuo.
En conclusión, puedo reconocer que sin uno ni lo otro no se podría vivir. En estos tiempos donde somos seres selectivos tendemos a echar mano de lo que nos muestran más atractivo e intuitivo para poder decidir cuál o cuáles opciones tomar. En lo personal me gustan los libros en papel, pero también si no se pudiera conseguir de este modo, optaría en lo digital por medio de ebooks para informarme o aprender, adaptándome así a las circunstancias.
No podemos hacer pelear lo que humanamente se hace a favor de nosotros mismos, antes bien, debemos mirar como una ayuda mutua a la tecnología con aquello que realizábamos en tiempos pasados. Sin embargo, no olvidemos nuestras raíces e impulsemos la bonita afición o hábito de leer.
[…] obras literarias de este tipo nos llevan a conocer épocas y mundos insospechados, a adentrarnos en la psicología […]