Una joven regiomontana se quedó sola en su casa y empezaron a suceder cosas extrañas, le hablaron como si fuera la voz de su padre, le prendieron y apagaron la luz y hasta un bote le aventaron por la escalera dejándola completamente aterrada.
Hasta nuestro grupo de Mitos y Leyendas de Monterrey y del Mundo llegó esta historia de forma anónima y en ella nos cuentan:
“Cuando yo tenía como 19 años aún vivía en casa de mis papás. Un día estaba yo sola en mi casa, para ese momento mis papás ya tenían unos 15 minutos que se habían ido al centro de Monterrey por unos mandados que tenían que hacer, yo me quedé en mi cuarto y en eso escucho la voz de mi papá gritándome -¡hijaa ven! inconscientemente le digo -ahí voy y me fui al cuarto de ellos pensando que estaban ahí, pero luego me acordé de que se habían ido y me bajé corriendo a la entrada de la casa pensando que podrían estar afuera y se les habría olvidado algo.
Pero no era así, no había nadie, salí a buscarlos y nada, me dio mucho miedo y mejor me quedé en la sala, al rato escuché como prendían y apagan el foco arriba y yo en ese momento ya estaba abajo y seguía sola, me asusté mucho, pero agarré una escoba y me subí a ver quién era y no había nada ni nadie.
Pero algo extraño ocurrió cuando me bajé nuevamente a la sala porque me aventaron un bote, hizo mucho escándalo en la caída y al rodar por las escaleras, en ese momento ya no aguante más, el miedo se había convertido en terror y salí corriendo de la casa y ya no entré hasta que llegaron más tarde mis papás, y no podían creer todo lo que me había pasado”.
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