Es muy común que muchos elijamos poner música de fondo que nos acompañe mientras hacemos nuestras tareas. Según el tipo de actividad, elegimos un género en partiular. Por ejemplo: música tropical o latina para las tareas domésticas, clásica instrumental para estudiar, rock para dibujar, y así, tan variadas como son el tipo de actividades, pueden ser las opciones de la música que preferimos escuchar.
De hecho, me encantan las aplicaciones que con sólo poner el tipo de actividad y el estado de ánimo, me ofrecen la play list adecuada, y aunque yo no entienda mucho eso de los algoritmos, es genial que siempre termino escuchando lo que me gusta para cada ocasión. Es la magia de la tecnología, el tipo de herramientas que hay que aprovechar.
Particularmente, mientras estoy escribiendo o realizando alguna tarea en que tengo que mantener la concentración lo mejor enfocada posible, prefiero la música instrumental, porque la letra de las canciones, me resulta un buen pretexto para distraerme y muchas veces mi mente puede volar hacia recuerdos o deseos y eso me hace perder tiempo cada vez que tengo que volver a conectar mi mente con la actividad que estaba haciendo antes de distraerme.
Armonizando
Encontré un canal en Spotify con música para «concentración perfecta», que cumple la función de manera extraordinaria y mucho mas. De hecho, cuando estoy trabajando acompañada de la excelente selección musical de este canal, todo parece fluir con libertad, sin estrés y con alegría. Las ideas, las palabras, las soluciones, todo llega a mi mente como atraído por la música… casi puedo «ver» como baila la sabiduría al rededor de mi mesa de trabajo. Esto es la magia de la tecnología cuando se conjuga con las emociones correctas.
Mientras trabajo en casa, esta magia se extiende más allá de mi mesa de trabajo, se puede sentir en toda la estancia, flota por la sala, va hacia la cocina, recorre mi terraza y hasta se puede respirar la paz y positivismo que ésta inspira. Esto es a lo que yo llamo «HOME office – SWEET – HOME office».
