El pensamiento positivo es la forma de deliberar en nuestra mente que nos permite ser optimistas y mantener una calidad de pensamientos en sintonía con lo positivo en el ámbito personal, familiar y profesional.
Esta forma de pensar tiene muchos beneficios que nos ayudan con nuestra tranquilidad mental, con los momentos de felicidad y a tener una buena relación de comunicación con los demás.
Aunque sabemos que no es fácil mantener nuestro pensamiento en positivo ya que podemos tener hasta 50 mil pensamientos al día de los cuales los expertos dicen que está científicamente comprobado que la mayoría suelen ser negativos o con vinculación al pasado.
Para la mayoría suele ser difícil ya que la rutina y el trabajo diario, los amigos, familiares o la misma sociedad nos pueden llevar a sostener la negatividad en nuestros pensamientos como algo “normal”, pero la buena noticia es que en cualquier momento podemos tomar la decisión de cambiar.
Para cambiar hay que mantenernos en constante vigilancia de nuestros pensamientos para que cada vez que tomen el rumbo negativo o al pasado podamos detenerlos inmediatamente y con esfuerzo, disciplina, dedicación y constancia poder cambiar el rumbo hacia el lado positivo.
Para mantener constante el pensamiento positivo hay que evitar usar en nuestro lenguaje las palabras limitantes como: No puedo, no debo, no sé, no tengo, esto nos ayudará a romper los paradigmas limitantes que nos han impuesto para evitar nuestro crecimiento.
Tenemos que vencer nuestros pensamientos negativos ya que ellos nos alejan de nuestro objetivo, hagamos a un lado el odio, la envidia, el enojo, el resentimiento, el miedo, la envidia y en fin todas aquellas emociones que bajan nuestra frecuencia vibratoria, no les prestemos atención y cambiemos inmediatamente de polaridad pensando en el Amor incondicional de Dios.
Algunos de los objetivos que podemos alcanzar con el pensamiento positivo son:
- Aumenta la expectativa de vida, mejora la salud, el bienestar físico y mental.
- Nos facilita a conseguir nuestros objetivos, a asumir el control de nuestro pensamiento y nuestra vida.
- Permite crear oportunidades de éxito y mantener una mentalidad triunfadora.
- Nos ayuda a mantener la aspiración de logro y alcanzar nuestros sueños.
- Nos permite generar más y mejores ideas.
- Aumenta la jovialidad, la alegría y nos dibuja más tiempo una sonrisa en el rostro.
- Mejora la capacidad para enfrentar situaciones difíciles.
- Nos permite adaptarnos mejor a los cambios y tomarlos como una oportunidad para crecer.
- Nos permite desarrollar hábitos positivos, para alimentar las aspiraciones de éxito.
- Nos permiten ver los errores como un aprendizaje en lugar de un fracaso.
- Mejora la calidad cardiovascular.
- Nos ayuda a crear un futuro de posibilidades y evita enfocarnos en las dificultades.
- Un sujeto con pensamientos positivos inspira a los demás.
- Si eres líder te permite auto motivarte y motivar a tu equipo.
- Proporciona recursos para resolver los problemas y evita que vivamos atrapados en nuestras dificultades.
- Nos mantiene optimistas y a mejorar nuestras relaciones personales.
- Ayuda a sanar nuestra autoestima.
- Nos convierte en personas más proactivas y menos conformistas.
- Disminuye los estados de estrés, depresión y tristeza.
- Reduce la ansiedad, frustración y preocupación. Entre otros.
Los beneficios del pensamiento positivo pueden reforzarse a través de las afirmaciones positivas como por ejemplo: “Yo Soy capaz de hacer realidad mis sueños y metas”, “Yo me mantengo optimista la mayor parte del día”, etc.
Debemos de tomar el pensamiento positivo como un camino diario y no un fin, vigilar nuestro pensamiento para que no se desvié y ser constantes, de esta manera disfrutaremos los múltiples beneficios que tiene el Pensar Positivo.
Bibliografía:
Pensamientos Positivos | Características y Beneficios (esalud.com)