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Dentro de la literatura del siglo VII está grabada la historia legendaria de un monje que venció a un mítico monstro a orillas del Lago Ness en Escocia, haciendo la señal de la cruz invocando a Dios y regañando a la bestia, ese misionero fue San Columba de Iona.

Pero quien era este legendario personaje que nació el 7 de diciembre del año 525 en Garten un condado de Donegal, en Irlanda era hijo de Fedlimid y Eithne del clan conocido como Ui Néill se le bautizó con el nombre de Colum que significa “Paloma” y fue por parte de su padre tataranieto de Niall, un rey irlandés del siglo IV.

De joven entró a la escuela monástica de Moville en donde recibió el diaconado y posteriormente el sacerdocio y por medio de milagros se empezó a manifestar santidad. Dice la leyenda que por medio de sus oraciones convirtió el agua en vino para el santo sacrificio y le llamaban Columba, también lo conocían como Colum Cille, presbítero y abad.

Viajó por varios lugares conoció las tradiciones de la iglesia galesa y se convirtió en uno de los 12 discípulos de Clonard que fueron conocidos después como los Doce Apóstoles de Irlanda.

Según la tradición en el año 560 se vio envuelto en una disputa con San Finnian, Columba copió un manuscrito –salterio- por órdenes de Finnian, quien al final pretendió quedarse con la copia haciéndola aparecer como de su autoría, fue la primer querella por derechos de autor, lo cual fue una de las causas de la batalla de Cúl Dreimhne que se luchó en 561 en donde hubo numerosas muertes, al documento litúrgico de la disputa se le conoce como Cathach de San Columba. El levantamiento se debió también al asesinato del príncipe Curnan, que era su pariente.

Se cuenta que Columba, con sus oraciones, hacía que los hombres del norte que luchaban aguantaran ferozmente la batalla. Mientras que Finnian hacía lo mismo por los guerreros contrarios de Diarmait, pero éste fue derrotado y perdieron más de 3000 hombres.

Como penitencia por tantas muertes fue enviado como misionero a Escocia para convertir a tantas personas como habían muerto en batalla, viajó en el año 563 con 12 compañeros, exiliándose de Irlanda.

Según la leyenda desembarcó en la península de Kintyrey a los 44 años de edad, pero como todavía se veía su tierra natal que le recordaba la matanza, se dirigió hacia el nortea la costa occidental de Escocia, ese mismo año le fueron concedidas unas tierras en la isla de Iona, que se convertiría al paso del tiempo en el centro de su misión evangelizadora ante los nativos llamados Pictos.

Dirigió el único lugar de cultura letrada en la región y adquirió una gran reputación como hombre santo y de letras, gracias a su actividad diplomática con las tribus y varios milagros realizados en su afán evangelizador.

Se dice que cuando fue a visitar al rey Brude con varios misioneros no se les permitió la entrada y las puertas les fueron cerradas con cerrojos, pero con el signo de la cruz y una oración a Dios los cerrojos se movieron y las puertas se abrieron abruptamente de par en par pudiendo entrar al castillo.

Se cuenta que el rey asombrado por tal milagro escuchó atentamente a Columba y fue bautizado al cristianismo, más tarde la gente seguiría su ejemplo y así se formó un movimiento evangelizador que se extendió por toda Caledonia, aunque tuvo su oposición por quienes representaban el paganismo de la nación y estos eran los Druidas.

Pero tal vez el milagro más sorprendente fue cuando se enfrentó al monstro del Lago Ness  la historia se dice está escrita en “La Vita Columbae” , que es la vida del santo y en ella se afirma que en cierto día se percató de la presencia de un grupo de nativos –pictos- que estaban enterrando a uno de los suyos que había sido mordido por un ingente monstro que estaba en el agua.

Mientras el santo se encontraba en el lugar apareció nuevamente la creatura que quería matar a otro hombre que se encontraba nadando:

Al notar que Lugne [el nadador] agitaba las aguas de la superficie mientras nadaba, emergió de repente, y con la boca abierta y un gran rugido se precipitó hacia el hombre que nadaba en medio del Ness. Mientras todos los presentes, bárbaros y hermanos por igual, se quedaban paralizados de horror, San Columba alzó la mano e hizo la señal de la cruz en el aire, y después, invocó el nombre de Dios y ordenó a la bestia: “No seguirás adelante. No toques a ese hombre. Da media vuelta al punto”. Al oír la orden, la bestia, como si tiraran de ella con unas cuerdas, se zambulló a toda prisa en las aguas del lago Ness. Los bárbaros paganos, sobrecogidos por la magnitud del milagro, adoraron al Dios de los cristianos”.

Se dice que muchos extranjeros lo buscaban y recibieron ayuda para sus almas y sus  cuerpos; y que en Iona, San Columba se la pasó estudiando, rezando y trascribiendo, escribió con su puño y letra cerca de 300 libros, dos de los cuales el Libro de Durrow y el Cathach han subsistido hasta nuestros días.

El 8 de junio del 597 subió a la colina y bendijo su hogar y poco antes del servicio de medianoche entró a la iglesia y frente al altar entregó tranquilamente su alma a Dios, tenía 77 años de edad, los monjes enterraron sus restos mortales dentro del monasterio. Su libro y sus ropas se guardaron con veneración en Iona y cuando los sacan en procesión se realizan muchos milagros, eso es lo que la leyenda cuenta.

Escrito Por: Manuel “marroco Marroquín 15/03/2023

Bibliografía:

Columba de Iona – Wikipedia, la enciclopedia libre

San Columba de Iona • Calendario Santoral

La historia del monje irlandés que repelió al monstruo del lago Ness (aleteia.org)SAN COLUMBA – Diccionario Enciclopédico de Biblia y Teología

Y volví a saludar al señor conejo
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