Su hijo estaba agonizando, las enfermeras no le hacían caso, el doctor se había ido a dormir la madre estaba tan desesperada que oró a Dios, a la Virgen de Guadalupe y a San Judas Tadeo quienes le hicieron el milagro y salvaron a su bebé.
En muchas ocasiones puede más la fe que la ciencia, quienes daban ya por muerto al niño, pero no contaban con el poder de la oración y en que los milagros existen, la siguiente historia nos fue enviada a nuestro grupo de “Mitos y Leyendas de Monterrey y del Mundo” por la señora Blanca Rojas.
La mujer nos cuenta qué: “interné a mi bebé en la clínica 4 del IMSS de bronquitis” aunque iba algo malito nunca pensó que su hijo estaba a punto de morir.
“A la semana me le dio bronquios, a los 15 días se convulsionó mi bebé me le hacen estudios según el doctor, me dijo que era reflujo” ella pensaba que muy pronto se aliviaría, pero todo dio un giro de 360 grados, la muerte andaba rondando.
Cuando el bebé convulsionó lo quitan de los brazos de su madre que inmediatamente se puso a llorar al verlo así… “yo estaba echa un mar de lágrimas y le hacen una punción el doctor me lo punzó mal, lo sangró y así me lo dejaron” en su cama.
“En la madrugada de ese día veo que mi bebé estaba dejando de respirar y yo llorando diciéndole a las enfermeras que me buscarán al doctor, pero ellas no me hicieron caso solo se miraban, por lo que fui y lo busque yo misma hasta pediatría y me dijeron que el doctor estaba en piso que exigiera que me lo buscaran y eso hice, llegué les exijo que me buscarán al doctor él estaba dormido””
“Van y lo levantan y me dijo el doctor que mi hijo estaba agonizando, que solo me quedaba esperar la hora de que mi bebé falleciera yo llorando empecé a orar, a pedirle a Dios, a San Juditas Tadeo y a la Virgencita de Guadalupe que no me lo quitarán, yo estaba junto a mi bebé y eran las dos de la mañana”.
Parecía que no respiraba, estaba agonizando y para ese entonces el reloj marcaba las 4:05 de la madrugada, su madre desesperada a su lado seguía orando y pidiéndole al Creador que se lo dejara.
De repente el niño despertó, reaccionó “después de 5 días, le hicieron otra punción, y salió con 870 células de meningitis era muy alto para un bebe de 3 meses de edad, me dijeron que iba a quedar como niño especial” por todo lo que había sucedido, que nunca volvería a ser normal.
“Pero gracias a mi Dios Padre, mi hijo es un niño normal y por cierto es muy alegre y muy inteligente, cuando en la clínica me dijeron que no iba aprender”.
El poder de Dios es grande, la fe y la oración son poderosas y dieron nueva vida al bebé que se ha desarrollado normalmente y a pesar de que le dijeron que iba a tener algún retardo y se iba a quedar como “Niño especial” es muy inteligente y ambos madre e hijo fueron objeto de un verdadero milagro.
