Después de una noche de rumba de sábado imagine un deseo cumplido, iba caminando a casa pedro Alcázar, un joven de 18 años, de piel tostada por el sol, de contextura atlética por la asidua práctica de natación en el colegio finalizadas las clases, 1.90 metros de estatura, ojos verde miel, cabello lacio de un tono negro azabache a la altura de los hombros.
Cuando de pronto, se detuvo un carro extraño nunca antes visto por la ciudad, era un Ferrari convertible rojo, se bajó un personaje muy peculiar, era un hombre maduro vestido de negro, de tes trigueña, alto aproximadamente de 2 metros de estatura, cabello cobrizo con corte clásico, ojos azules grandes con un brillo macabro.
Le dijo con una voz de trueno:
“Soy Alma, el ángel de los deseos, estos son los que nos mueven e impulsan a actuar”.
Al escuchar esto, el muchacho se sintió desmayar por el temor.
Cambiando el matiz de voz por uno más dulce mirándolo fijamente a los ojos continuó:
“¿Qué es lo que más deseas en el mundo en este momento?”.
Pedro le respondió atemorizado con voz titubeante:
“Looo que más deseo en el mundo es ser invisible para percibir el universo con todos mis sentidos sin interrupción”.
Alma sonrío de una forma malévola para posteriormente decirle que su petición había sido concedida, chasqueó sus dedos apareciendo los dos en el interior del carro.
Dentro del vehículo le reiteró la pregunta:
“¿Qué es lo que más deseas en el mundo en este momento?”.
El joven respondió con más seguridad que antes.
“Ser invisible por un día para percibir el universo con todos los sentidos sin interrupción”.
El chico sintió el aroma de la cojinería de cuero, evocó el día que asistió a una práctica del colegio en una empresa que elaboraba artículos en este material, al volver a la realidad, Pedro le pregunta aterrorizado:
“¿A dónde me lleva?”.
El Ángel le argumentó que, a su casa, que tenía que dormir para descansar y tener las energías suficientes para vivir el mejor día de su vida.
Deseo por cumplir
Al llegar a su confortable morada, le dio las gracias a Alma, se bajó del vehículo e inmediatamente el automóvil desapareció como por arte de magia, se sorprendió por lo que entró a su casa temblando de los nervios, pero al mismo tiempo con mucha expectativa corriendo a su cuarto, se tiró a la cama como un gimnasta haciendo una voltereta en el aire aterrizando en su lecho cayendo en un profundo sueño.
A las 6 am sonó el despertador, provocando que se despertara exaltado, que de un salto tropezó la mesa de noche lanzando el aparato al suelo iniciando una carrera maratónica hacia la ducha, activó el calentador provocando que todo el lugar quedara invadido de una espesa bruma.
Al finalizar el baño con esa sensación de renovación y bienestar, fue a secarse, limpió el espejo, ya que estaba empañado quedando estupefacto porque su reflejo estaba ausente, recordó automáticamente esa experiencia fantástica de la madrugada, sonriendo satisfecho con un poco de nervios.
Revisó su guardarropa, se puso su uniforme, cogió su bolso, caminó a la cocina, al pasar por la sala se ubicó frente al espejo con marco tallado de madera fina pintado de dorado confirmando una vez más que su deseo cumplido estaba consumado.
Por otro lado, escuchó la voz de su madre llamándolo desde el cuarto de él diciéndole que el desayuno estaba listo, que se iba al trabajo, que se le hacía tarde para una reunión, él la esperó cerca de la puerta, le dio un beso en la mejilla y un abrazo, ella al sentir su perfume gritó “hijo” y salió corriendo despavorida al no ver a nadie.
Empezó a florecer el deseo
Pedro se sintió triste, ese no era el inicio de día que había imaginado asustando a su querida madre. Fue a la cocina, desayunó desganado lo que su progenitora le había preparado con cariño: Fruta picada, granola con yogurt y su proteína en polvo.
XXXXXXXXXXXXXXCargado de energía se dirigió caminando rápido al colegio, ya que le quedaba a cuatro cuadras, cuando llegó todos los alumnos estaban entrando, aceleró el paso hasta llegar a su aula de clases.
La profesora los estaba esperando, se sentaron, la docente comenzó a pasar lista, al llegar el turno de Pedro Alcázar al contestar presente, todos entraron en pánico mirando a todos lados deteniendo la mirada en su silla, gritando “no hay nadie, es un fantasma”, se puso de pie en un rincón mientras sus compañeros formaron un caos tirando todas las sillas en un estado de histeria.
La tutora en medio de la confusión trataba de calmarlos, pero fue inútil, salieron atemorizados al patio con una algarabía, el escándalo había invadido todos los salones de clase interrumpiendo las labores académicas, por lo que los alumnos de los diferentes cursos se ubicaron en las ventanas que comunicaban al patio salón preguntándose qué le pasaba a ese grupo que corría de un lugar a otro como si un enjambre gigante de abejas invisibles los acechara en todas las direcciones.
Pedro deseo cumplido
El joven estaba en el suelo revolcándose con una crisis de risa por ese desorden que estaba provocando hasta que se fastidió de ver a sus compañeros en ese estado de desesperación, que fue a la cafetería por unos cerillos y le colocó uno a la alarma de incendio.
Enseguida se activaron chorros de agua dando la impresión de que hubiera cascadas por todos lados revolucionándose la institución aún más, formándose piscinas en las aulas, los alumnos pasaron de un estado de confusión a vivir un momento de euforia nadando, jugando a las luchas.
Aprovechó la emoción de la multitud para buscar a su novia, la vio en un sector despejado donde el movimiento del agua había dirigido sus útiles escolares, inmediatamente nado para rescatar sus pertenencias, ella notó la formación de un remolino dejándola paralizada de la impresión, cuando terminó de guardar todo en su bolso le agarró la mano.
Ella gritó, pero como estaban sus compañeros distraídos jugando no le prestaron atención y Pedro le expresó sus sentimientos al oído su deseo cumplido, le dijo que se tranquilizara, que nunca le haría daño, que él la amaba, que pronto iban a estar juntos para verse a los ojos y hacer todas esas actividades que hacían para compartir gratos momentos.
Deseo cumplido
A la joven al escuchar esas palabras le volvió el alma al cuerpo, se le salieron las lágrimas, él la abrazó correspondiendo ese acto de amor, confianza y comprensión dándole un beso tierno y corto, ella se sentía extraña besando a alguien invisible, pero a la vez tangible, era como estar en otra dimensión viviendo un momento muy especial con la sensación que estaba caminando sobre las aguas esparcidas por toda la institución en ese lapso que duró el breve acercamiento.
Se despidió de ella más enamorado que antes. De pronto, divisó a Pablo su mejor amigo en el centro del patio salón, se acercó a él tocándole el hombro, quedó en Shock de la impresión, ya que no vio a nadie, sintió un escalofrío, hasta que Pedro decidió hablarle de una vez por todas, preocupado por la crisis de pánico por la que estaba pasando su hermano de corazón, le dijo que era Pedro.
Comenzó a mover el agua, le tocó nuevamente el hombro, él no comprendía como era posible aquello, entonces él le contó su experiencia en la madrugada con el ángel de los deseos, al principio le pareció un poco absurda la historia, pero al comprobar lo verídico del relato ya que lo podía escuchar, pero al mismo tiempo no lo podía ver, no le quedó más opción que creerle. Después de la conversación se despidieron trasladándose cada uno a su casa.
El deseo cumplido ama
Al llegar a su vivienda estaba estresado, con dolor de cabeza por esa caótica mañana, se dio un baño tibio con burbujas en su tina con sales minerales, tomándose un té de manzanilla que lo relajaron pensando en lo bueno que tenía en su vida que era su madre, su novia, la natación, su amigo y los propósitos porque luchar.
Ese deseo cumplido no había sido un error, sino una experiencia que no había sabido manejar, porque no hay que ser invisible, al contrario, ser muy visible para disfrutar realmente y percibir el universo con todos los sentidos valorando lo que se tiene.
Al concluir su baño con el dolor de cabeza reposado y los pensamientos frescos, se puso una pantaloneta, camiseta, tenis, preparó unas pastas con jamón y queso, almorzó y se fue a su entrenamiento de natación en el colegio.
Cuando llegó se propuso ser discreto en su actuación para esta vez no atemorizar a nadie, hizo calentamiento y estiramiento fuera de la piscina, al finalizar este se puso su bañador, se duchó, se colocó su gorro y gafas, tomó su carril, realizó sus respiraciones, desplazamientos de un extremo a otro, practicando los estilos de espalda, pecho y mariposa, terminando con una sesión de abdominales.
Quedó exhausto, pero satisfecho porque se deshizo de las tensiones acumuladas del día con la actividad física, se dirigió a la ducha.
Deseo cumplido y satisfecho
Mientras el agua caía sobre su cabeza pensó en hacer algo para reivindicarse con su madre, su novia y su amigo, decidió que le haría una cena especial, se planteó varias opciones de menú, pero le pareció mas exquisito para la ocasión un filet mignon, puré de papa, ensalada verde con una vinagreta natural de limón, sal y pimienta y acompañarlo con un vino tinto semiseco.
Cuando terminaron de fluir esas ideas en su mente, salió corriendo deprisa a su casa para llamar a su madre para preguntarle si estaba disponible o tenía alguna reunión extraordinaria y comunicarse también con su novia y su amigo.
Afortunadamente todos estaban disponibles, se puso manos a la obra a cocinar, a las 7:00 pm sonó el timbre, Pedro Alcazar ya estaba apropiadamente vestido con un pantalón gris plata con corte clásico, zapatos de cuero gris humo, camisa manga larga azul celeste, su cabello recogido.
Llegó su novia Analía con un vestido coral a la altura de las rodillas que se ajustaba a su cintura, un sobre y plataformas blancas, su cabello color miel a la altura de sus senos, su test claro con su maquillaje natural y todo el conjunto lo dejaron sorprendido una vez más con la belleza que no aguantó las ganas de besarla y abrazarla, enseguida se dio cuenta que el término del deseo cumplido había caducado siendo nuevamente visible.
Hay que disfrutar lo que tienes…
Llegó la Sra Paola, su madre, lo abrazó fuertemente expresándole que era muy grato volverlo a ver, que no le volviera a hacer eso, que se sintió en una película de terror por lo que él le hizo esa promesa a su progenitora, ella les pidió permiso para ir a cambiarse.
Tiempo después llegó Pablo vestido acorde a la ocasión con un pantalón clásico blanco, zapatos negros de cuero y una camisa manga larga amarilla.
Les dio un saludo de mano y un abrazo fraterno, tomaron una Copa de vino para esperar a la madre que como si le hubieran cronometrado el tiempo al finalizar esta bajó también muy a tono con la velada con un pantalón beige, tacones cafés, una blusa roja bordada, maquillaje en pigmentos tierra que resaltaban la tonalidad cobriza de su piel que le hacía homenaje a sus antepasados étnicos que la llenaban de orgullo, además mostrando lo bien mantenida que la tenía.
Pasaron a la mesa, pedro brindó por la vida, el amor, la familia, la amistad, por los deseos cumplidos y los que están por realizarse.
Todos disfrutaron de la cena con ese delicioso y nutritivo menú, prometiéndose no pedir deseo cumplido a la ligera y comprometiéndose a cumplir los que verdaderamente nazcan y se cultiven en el corazón para edificarse como personas, ciudadanos y profesionales irradiando esa luz para convertirse día a día en seres humanos colmados de plenitud y felicidad.