Hoy vengo a platicarles sobre cómo a partir de una ruptura tuve la oportunidad para crecer, tanto física como mentalmente. Antes de comenzar les platicaré una pequeña historia sobre cómo empezó esto.
Todo comenzó cuando una relación que ya tenia 2 años terminó de un día para otro, de manera tan súbita que apenas y pude digerir lo que sucedía. A pesar de no llevar realmente mucho tiempo, aquella mujer me hizo pasar un tiempo maravilloso, uno que nunca antes había experimentado, tan grande que lo ultimo que llegó a pasar por mi cabeza fue que tendría su fin. Así fue que cuando ella me dejó, me quedé en un estado de vació, depresión, ansiedad y sin ganas de hacer algo que no fuera auto compadecerme. Busqué miles y miles de artículos así como vídeos sobre que debía hacer, pero sentía las palabras vacías, llegué al punto de sentirme incomprendido, que el dolor que estaba sintiendo nadie mas podría entenderlo. Fue durante estos largos momentos que abarcaban días enteros, que decidí cambiar mi actitud. ¿Por qué? Por mi bien.
Lo primero que hice fue dar el primer paso: borrar toda foto y recuerdo que tenía con ella, tanto en redes sociales como en el celular. Lo segundo fue tomar los regalos que me dio y guardarlos en una caja. Mucha gente suele tirarlos, lo cual es algo válido, sobre todo si la relación terminó mal, pero en mi caso no fue así, entonces opté por ponerlos en una caja de zapatos la cual se quedaría bajo mi cama. Lo tercero fue darme un buen baño, un aseo personal necesario y respirar muy hondo para después exhalar, sacando toda esa incomodidad que sentía en el pecho.
Ya habiendo cumplido esos tres pasos, lo siguiente fue planear mi plan de vida a futuro, tomé un cuaderno y comencé a escribir las cosas que quería lograr, metas que tenía para futuro. Qué podía hacer ahora y qué podría hacer en el futuro. Cuando terminé de anotar me sentí diferente, más despejado a pesar que la seguía extrañando. Cuando revisé mi lista me di cuenta que tenia oportunidad de cumplir varias y la primera que tenía era comprar un curso para aprender a programar.
Estaba feliz al darme cuenta que era la primera vez en tanto tiempo que podría comprar algo sin preocuparme sobre si tendría dinero para invitarla a cenar, acompañarla a su casa y que me sobrara para regresar a la mía. Creo que en este momento vi grandes posibilidades que tenía. Lo segundo que hice fue arreglar bastantes problemas personales que había dejado en pausa por miedo a que los resultados afectasen a mi pareja. Terminé de resolver los problemas y mi cuerpo se sintió ligero. La tercer cosa que hice fue retomar tiempo para leer y escribir, ahorrar dinero para más libros y también para algún curso de escritura que pudiera tomar una vez terminado el que tenia de programación. La última cosa que hice, y la mejor de todas, fue el comunicarme otra vez con viejas amistades que había dejado de lado por estar con mi pareja. Mis amigos me apoyaron bastante para salir adelante cuando les platiqué cómo me sentía. Estuve feliz al ver cómo se preocupaban por mí.
De esta manera me mantuve ocupado, preocupándome por mí, trabajando para mejorar como persona, ser la mejor versión de mí mismo. Puedo decir que la relación que tuve con aquella mujer fue grandiosa, a pesar de sus fallas, pero también me di cuenta sobre cuánto había descuidado mi persona como individuo único. Le estoy muy agradecido tanto a ella como a todos los que me apoyaron.
Creo que todos podemos salir adelante si realmente lo intentamos, sin importar que tan decaídos podamos llegar a estar. Así como yo salí adelante creo que todos podemos hacerlo.
