Una de las cosas que más me gusta hacer es escribir y si esto de alguna forma hace que la gente se divierta y pase un rato agradable, pues que mejor. Dado la crisis causada por el virus que causa la enfermedad de COVID-19, mucha gente ha caído en la desesperación, estrés o ansiedad pero si lo vemos desde el punto de vista divertido o sarcástico, puede convertirse en algo hasta entretenido ya que siempre he creído que burlarnos de vez en cuando de nosotros mismos, nos hace ver la vida de otra forma y no con tanta solemnidad. Por eso, empecé a escribir estas pequeñas crónicas de lo que de vive en una ciudad tan grande y compleja como lo es la Ciudad de México, espero les gusten y no se sientan ofendidos con el lenguaje usado, al final de cuentas vivimos en una urbe con todo tipo de personas, provenientes de estratos sociales muy diversos, estos es lo que hace rica a esta ciudad.
Empecemos con la primera entrega:
Al virus hay que llamarlo por su nombre completo aunque te tardes más. Un ente microscópico sin vida es capaz de hacer un desmadre y eso no cualquiera lo hace.
De regreso a la rarita «nueva normalidad»
La combi llena, sólo un usuario pasándose de listo sin su cubrebocas, eso sí ya me andaba mareando eso del frena y acelera no es lo mío, ventanas cerradas. Que me puedo esperar del transporte del Mordor-Mex. En el Metrobus bien, te toman la temperatura al ingresar y tu gel, tan genial como en el primer mundo, el llevele Llevele bara bara, tamales, atole, tortas pa’l desayuno no se vaya con la panza vacía a «chambiar», así hasta da gusto regresar a chilangolandia my love.
Hasta el momento todo en orden.
Ya es la hora de regresar al reino del Mordor-Mex. Viajas en el Metrobús y es otro rollo, más orden, está más limpio todo es más cool pero como en el cuento de la Cenicienta solo llegas a Indios Verdes y se acaba el encanto.
Mugre, más mugre, mucha mugre, la venta a todo lo que da: llevele el cubrebocas 5×10, lleveeleeee el DVD, el regalo, ese bonito detalle para el niño, para la niña (que incluyentes), taquitos 3×15, galleta mordisco de holanda, la magnun de a $5 y $10, no está caducado, “de a rober”, lleveleeeeee. Este cantico celestial se confunde con el súbale ya se va: Prados Laguna, Villa, Tulte, Ojo di agua, Tecama, héroes por la pista… No hago paradas en San Cris… Subaleeee pasaje en mano pa’ que se vaya rápido el chofis. El mero barrio, la bandita del Ecatebronx y anexas.
¡Que milagro güerita, péreme pa’ que se vaya adelante…Orale chango!!! Abre la puerta pa’ que se suba la güerita y cobras la tarifa como es ni te pases de listo con el pasaje…Diálogo de la checadora de la ruta y…chango es el chofer.
Vean nada más ni el virus ha cambiado el entorno de Indios Verdes.
Esta crónica continuará…