En todo el mundo se conoce a Corea del Sur por el movimiento K-pop. Este tipo de música ha sido impulsada fuertemente por chicos coreanos, con bailes que exigen un enorme poder de coordinación entre los integrantes.
Pero los ídolos del K-pop no solo son boybands. Lo que caracteriza a estos integrantes es su cutis perfecto: Una piel tersa, tan perfecta que parece de porcelana.
En julio tuve la posibilidad de viajar a Seúl. Un viaje de placer. Quise experimentar los días que estuve, cómo viven su día a día los coreanos: hospedándome en un lugar céntrico en Seúl, utilizando el transporte público, probando verdadera comida coreana, comprando en un tianguis o flea market, etc.
Ahora sí, la pregunta ¿Corea del Sur es un país superficial?
Cada quien habla como le va en la feria y desde lo que yo experimenté, puedo asegurarles que NO. No es común encontrarse en cada esquina a personas con una piel de 10, las hay, pero no es lo común.
La primera noche fui de compras a una tienda Daiso, y el área con más gente era el área de cuidado personal. Pasas por los pasillos y tienen una infinidad de mascarillas para ojos, labios, rostro, cuello; maquillaje, correctores, cintas transpirables para las mejillas y aparatos para nuestro embellecimiento. Esa noche me llevé muchas cosas para probar.
Al comprar mascarillas y guantes para las manos, en un inicio pensé en los resultados. Al utilizarlos me olvidé de eso. La sensación fue tan agradable que, en vez de superficial yo lo llamaría un país hedonista. Todo lo que utilicé (hasta los artículos de higiene femenina) fue un festín verdadero para mi tacto.
Priorizan más la comodidad
Y, mi perspectiva es que, si bien en occidente nos invaden con imágenes de que en Corea del Sur son gente muy hermosa y perfecta; lo que yo viví fue que ellos priorizan más la comodidad que otros aspectos, y sí, en todos los rubros, como son su transporte público, las áreas de recreación son muy acogedoras, los museos son lugares tranquilos, relajados; los baños públicos gratuitos tienen todo, todo para que sea una grata experiencia, te ponen hasta música clásica y eso ya es mucho decir.
El poco tiempo que estuve en tan bello país, hace que hoy en día extrañe la sensación de estar flotando entre nubes.
Si son personas kinestésicas, créanme que amarán este lugar.