Dos palabras con las que expresamos las mismas ideas, dos palabras que usamos como sinónimos, dos acciones que creemos iguales. ¿Qué tan equivocados hemos vivido hasta ahora?
Si bien el concepto de conquistar, empleado por la Real Academia española, engloba diversos significados para diversos contextos, la acción de conquista hace referencia a atrapar a alguien, someterlo con varias artimañas, hacer que de alguna u otra forma se doblegue ante ti, que te pertenezca, incluso sin que el conquistado lo sepa.
En muchas y reiteradas ocasiones mencionamos el conquistar a otra persona, la conquistamos con regalos, acciones, dinero, obras, etc. Ahora ¿Por qué no cambiamos esta palabra por otra, una palabra que se emplea como sinónimo? “La ganamos con regalos, acciones, dinero, obras, etc.”
El punto de esto, es básicamente ver, como aquello que se desea y se quiere para sí se conquista por diversos medios. Pero cuando hemos creído que es nuestro y que estará ahí con nosotros porque ya se ha ganado, en algún momento desea ser libre, puesto que tiene conciencia propia y libre albedrío, sin embargo no desea dejar de amar a la persona que le conquistó, pero si no le tiene cerca como posesión, no le podrá amar.
Ahora, esa persona que hemos “conquistado” desea salir y seguir viviendo, realizando sus sueños, pero sin dejar de amarte y sin que tú dejes de amarla. El problema es que como conquistador de esa persona, tú no la puedes dejar ir, simplemente no puedes dejar que abra sus alas y vuele, no puedes abrirle los grilletes y dejar que comience a caminar y después a correr veloz y feliz. No puedes porque tú la conquistaste para ti, la deseaste para ti, pero nunca la amaste.
Si amas a alguien no lo conquistarás, porque esa persona no debe ser tuya, debe ser suya, y si siendo suya llega a amarte, si siendo libre en mente, cuerpo y alma llega a amarte no habrá nada en el mundo que pueda romper ese lazo.
Recuerda, enamora a alguien, para que cuando esa persona vague por el mundo por sí solo, en su mente y en su corazón, siempre estés tú.
Puedes conquistar un pedazo de tierra, luego encontrarás una tierra mucho mejor y te desharás de la primera conquista, dejándola sometida por tus acciones. O bien, conquista una nación, y si la nación encuentra un conquistador mejor, se irá con él.
“Si dos personas se aman, se poseerán siendo libres”.
Enamórate de ti, buscando lo que te enamoraría de otro. Luego ese otro, cuando se enamore de sí, lo hará de ti también.