Nuestra infancia ha estado marcada de momentos buenos y malos, como todos los niños, contábamos con una basta imaginación, y los compañeros de esas hazañas que nos figurábamos, eran nada más ni nada menos que juguetes.
No importa si eran de marca, de los que nuestros padres compraban en el supermercado bajo una licencia autorizada de la caricatura que veíamos; o si eran adquiridos en un mercado, tianguis o afuera de la escuela, lo que hoy se conoce como bootleg.
Lo verdaderamente significativo para nosotros era que podíamos utilizarlos para jugar, podíamos crear mil y una escenas jamás imaginadas por el creador de la caricatura.
Aquellos bellos recuerdos en los cuales, jugábamos solos o con amigos, pero siempre acompañados de nuestros juguetes ha hecho que, al crecer, muchos de nosotros tuviéramos ese anhelo de querer recuperar esas piezas que marcaron nuestra niñez.
No solo son muñecos de acción lo que se busca recuperar, también muñecas, carritos, accesorios, y cualquier cosa que pudiese traernos a este momento, ese pedacito de pasado que nos hizo muy felices.
Hoy en día existe el término de “Cacería” haciendo referencia a la búsqueda de esas piezas perdidas, que podemos encontrar principalmente en tianguis, mercado de pulgas, o feria, dependiendo del país donde te ubiques.
Por lo general son piezas de uso, dado que los programas de televisión para niños van cambiando con el tiempo por lo cual, para ser “cazador” debes tener una buena vista para encontrar lo que deseas.
Pero esto no se limita al ámbito físico, también al virtual, donde puedes encontrar en páginas en internet lugares donde venden artículos del personaje que buscas. En este ámbito, mientras más años tenga la pieza mejor, aunque el que lo mantengan impecable hace que su costo aumente.
Puede que al adentrarte en este mundo del coleccionismo no des en un inicio con lo que buscas rescatar, y encuentres otros objetos que te transporte a otro espacio que no recordabas, pero que hoy te trae otras memorias.
Si piensas profundizar en esto de ser “cazador”, créeme que será una de las mejores experiencias, pues como dicen “Recordar es volver a vivir”.