Atrévete a soñar y hazlo realidad. ¿De qué tamaño son tus sueños? ¿Hasta dónde llega tu ambición? ¿Cuánto crees merecer? ¿En qué nivel está tu autoestima?
Empecemos por la palabra “Ambición”. Suena fuerte, parece agresiva, y sí, es una palabra de mucho poder. De hecho, la definición de AMBICIÓN es: “Deseo intenso y vehemente de conseguir una cosa difícil de lograr, especialmente riqueza, poder o fama.”
Las creencias incrustadas en el subconsciente, pueden impulsar o frenar nuestras acciones nuestros pensamientos, nuestros deseos.
Muchos de nosotros aprendimos de pequeños que ser ambicioso era malo y crecimos con ese concepto… y ya siendo adultos la vida nos fue enseñando que ser conformista era peor. O mejor dicho: Lo que realmente es malo, es ser conformista. No fuiste creadop para estar sumido en la mediocridad. Así que, si eres conformista, estás yendo contra tu naturaleza.
De pronto estás navegando en la internet y ves una imagen que realmente te hace soñar.
Pongamos como ejemplo: Ves la imagen de una hermosa familia, vacacionando en un hermoso yate, en una hermosa bahía, tomando un hermoso champagne, en unas hermosas copas… En tu mente comienzas a verte a ti mismo dentro de esa imagen. Puedes escuchar el sonido de las gaviotas que pasan volando alegres esperando atrapar alguna migajita de las botanas que ustedes están disfrutando, percibes el mágico olor del mar, cierras los ojos y puede sentir la brisa sobre tu rostro, y justo en el momento que vas a darle un sorbo a tu copa de champagne… ¡Crack! Escuchas el sonido de cristales rotos y regresas a la realidad… a tu actual realidad.
¿Sabes? Ese sonido de cristales rotos no provino de la copa de champagne… ese ¡Crack! fue el sonido de tus sueños que tú mismo decidiste detener.
¿Por qué te detienes? ¿Por qué no continuas con tus sueños?
¿Acaso no lo mereces? ¿Acaso es algo inalcanzable para ti? Todo lo que tu mente puede creer lo puedes crear.
¡Atrévete a soñar en grande! Confía en ti. Si crees que puedes tienes razón: puedes. Pero es indispensable que creas en ti mismo. Porque si dudas y crees que no puedes también tienes razón…
¿Qué hay de malo en desear riqueza, poder o fama? ¿Qué hay de malo en atreverse a vivir la vida de tus sueños?
Define de manera muy específica qué es lo que realmente quieres. Visualízalo con todo detalle. Imagínalo, siéntelo ¡vívelo!
Elimina cualquier pensamiento que te haga ver las cosas por las que no puedes lograrlo. Y con tu mente bien enfocada en lo que realmente estás deseando, pregúntate: ¿Como sí puedo lograrlo? toma papel y lápiz, comienza a escribir todas las posibles rutas para llegar a tu destino.
Atrévete a soñar y hazlo realidad.
Enlista todos tus talentos y capacidades, todas las áreas en que debes prepararte para alcanzar tus sueños, los hábitos que debes desarrollar para disciplinarte, fija una fecha límite para lograrlo y estar viviendo esa vida de tus sueños. Haz un plan y trabájalo, pero empieza ahora mismo. ¡El momento para tomar acción es hoy!