El 28 de abril de 2017 era la fecha en la que se efectuaría el llamado festival de música más lujoso del mundo. Modelos, celebridades e «influencers». promovieron la asistencia y la realización de este concierto originalmente ideado por Billy McFarland y el DJ Ja Rule.
Todo comenzó con la creación de la aplicación FYRE que permitiría a la gente contratar directamente a las bandas de música para eventos privados. El siguiente paso fue crear un festival de música.
Eligieron como escenario el paradisíaco cayó Norman, en Las Bahamas, que supuestamente había pertenecido al mundialmente famoso narcotraficante Pablo Escobar.
Con boletos que iban de los $5,000 y hasta los $120 mil dólares; la promesa de todo tipo de servicios lujosos como cenas exclusivas realizadas por los mejores chefs, fiestas con las modelos más famosas y todo el confort en cuanto a alojamientos e instalaciones parecían algo tangible. La realidad fue muy diferente.
El primer problema fue que no pudieron obtener la locación que ellos habían planeado, por lo que tuvieron que reubicar el evento hacia otra isla que no era para nada privada y ni siquiera cumplía con los requerimientos de espacio necesario para un evento tan grande, es más ni siquiera era una isla, por lo que tuvieron que «photoshopear» un mapa para engañar a los asistentes.
Se calcula que asistieron alrededor de 5000 personas a las que no se les pudo ofrecer ni los alimentos ni las instalaciones adecuadas para garantizar su estadía y seguridad.
Una de las primeras alarmas fue un tuit lanzado por el grupo de happy punk Blink 182 quienes anunciaron que no asistirían al Festival debido a la falta de certeza en dicho evento.
No hubo nada que McFarland pudiera hacer para evitar el desastre. Ni siquiera fue capaz de ofrecer a los asistentes alimentos de calidad ni hospedaje.
Al final todo se redujo a lo de siempre: la ancestral y nada glamurosa lucha por sobrevivir, hubo algunos periodistas que lo compararon con «Los juegos del hambre»; otros, menos hollywoodenses, lo vieron más como lo que pasa cuando se voltea un trailer en México: saqueos, peleas y agandalle.
Lo que sería el evento musical más grande y más lujoso del mundo terminó siendo un bodrio y ahora McFarland cumple una condena de 6 años en prisión, y se está planeando la indemnización de los asistentes y defraudados.
Si quieres saber más a detalle todo lo que ocurrió en este festival fallido existe un documental en Netflix que habla acerca de ello: FYRE The Greatest Party That Never Happened.
