Son tantos días los que se conmemoran o festejan dentro del Calendario anual que definitivamente algunos los pasamos por alto, y si nos encontramos con eventos que se ensalzan extraordinariamente nos encontramos que opacan a otros que deberían ser tan considerados como los primeros, este es el caso comparativo entre las celebraciones del Día de la Madre con la del Día del Padre.
Comenzamos con que el Día de la Madre cuenta con una fecha inamovible, el 10 de Mayo, sea este en Lunes o Jueves o Martes, siempre, siempre se celebra el 10 de Mayo en Mexico, mientras que el Día del Padre se festeja el 3er. Domingo del Mes de Junio, ¿la razón? supuestamente para no interferir en un día laboral.
La glorificación con la que se celebra el Día de la Madre llega a un nivel de exceso, es de esperarse en ese día que se les agasaje con serenatas, flores, regalos, salidas a restaurantes, paseos especiales y no faltan los medios televisivos dedicando programas especiales además de la repetición de películas que rallan ya en melodramas sesenteros.
Pero durante muchos años el Día del Padre paso como un día común, quienes tenían a bien recordarlo se conformaban con un decir: «Felicidades Papá» y ya, poco a poco se fue difundiendo la realidad de la importancia de la labor paterna en el hogar, haciendo a un lado la función del proveedor de bienes para dar cabida al guía espiritual, al consejero con experiencia, al hombro fuerte en el cual apoyarse, al protector en quien refugiarse y la celebración de un día especial para ellos fue tomando un papel más relevante.
Incluso en algunos casos se les ofrecen serenatas, se les brindan regalos y se les invita a salir, a restaurantes y a convivir con la familia entera.
Pero en estos tiempos modernos todo se ha convertido en tema de controversia, las celebraciones especiales son «producto de la mercadotecnia» quizá tengan razón, pero vale la pena ignorar la manipulación comercial a cambio de un momento de alegría familiar.
Lo molesto es que aparezcan las «mujeres empoderadas» las «madres luchonas» las que son «madre y padre al mismo tiempo» y denigren la figura paterna, y es molesto porque aunque muchas de ellas puedan tener razones válidas para tratar de desaparecer la imagen del padre en la vida de sus hijos, muchas más francamente están actuando con resentimiento, dolidas, con deseos de venganza y se aprovechan de la protección de las leyes para abusar de ellas.
Son muchos los Padres injustamente castigados sin permitírseles ver a sus hijos, convivir con ellos y son padres responsables que cumplen con el pago de pensión alimeticia y con los acuerdos alcanzados en el convenio de divorcio, y aun así, la mujer encuentra el medio, la excusa, el argumento para evitar que ellos puedan convivir con sus hijos, incluso manipulan a los niños en contra de sus padres y esta injusticia es poco promovida.
Las relaciones de pareja son difíciles, y cuando los conflictos son insalvables, la solución más sana es el recurrir al divorcio, pero debe quedar claro que el hombre se divorcia de la mujer y viceversa, pero padre y madre no se están divorciando de los hijos.
Esa falta de responsabilidad mueve a algunos hombres a desentenderse de sus obligaciones para con los hijos con la falsa idea de que ese dinero que provea será para la mujer y son esos padres irresponsables los que van perdiendo derechos que luego reclaman haciéndose el papel de víctimas.
La otra cara de la moneda es precisamente los padres responsables que si son de facto víctimas de ex-esposas resentidas que no paran de castigarles por lo que ellas consideran deslealtad de su parte, quizá tengan razón y ellos les fueron infieles, pero les fueron infieles a ellas, no a sus hijos, les fallaron a sus hijos en el sentido de no considerar que en su egoísmo ibas a desestabilizar el hogar que les prometieron, pero cuando el daño está hecho, se deben buscar formulas paliativas que disminuyan la intensidad de ese daño.
El punto medio se basa en la educación, padre y madre deben encontrar una formula de comunicación educada para bien de sus hijos, una forma de dirigirse uno al otro con respeto y sobre todo no intentar denostar la figura paterna ante los hijos.
Hoy, día del padre, queremos desearles a ellos ¡muchísimas felicidades! Que su lucha por ser los mejores padres del mundo continue y que si desafotunadamente sufren del secuestro de sus hijos por parte de la ex-pareja únanse a Asociaciones ya dedicadas a evitar este tipo de injusticias en nuestro País.
Esperemos que el día de hoy, que es SU DIA ESPECIAL, lo disfruten en grande al lado de sus hijos. FELICIDADES PAPÁS!!!
