Las circunstancias pueden ser muy complicadas en este momento a nivel mundial, es cierto. Y no es la primera vez en la historia, que el mundo parece colapsar y, sin embargo, aún existe la humanidad.
Si esperas ansioso que el reloj marque la hora de salir del trabajo, o te sientes feliz porque llegó el viernes que te permite evadir la realidad de tu rutina semanal, o sales con pesar cada mañana a «a perseguir la chuleta», te aseguro que estás en el lugar equivocado.
Es muy cómodo dar pretextos y conformarnos con resultados que nos tienen insatisfechos y frustrados. Es muy cómodo culpar a los demás, a las circunstancias, a la suerte, al universo, o a Dios diciendo que fue su voluntad.
Cuando estamos chateado y en nuestra conversación incluimos emojis llorando, tristes o enojados, de manera automática nuestro rostro imita esos mismos gestos ¿Lo habías notado?
Tienes el material y las herramientas necesarias para comenzar con tu gran obra. ¡Todo más que suficiente para crear algo grandioso! Principalmente tu talento. Nadie puede realizar ese gran proyecto mejor que tú, por eso fuiste contratado para hacerlo. ¡Eres el elegido!
