Somos una pareja que desde que comenzamos nuestro noviazgo siempre nos ha gustado viajar, honestamente ¿a quién no?. Pero durante 19 años de estar unidos, estoy casi seguro que en ningún momento pasó por nuestra mente que estaríamos viajando por México con un bebé.
Y es que la historia de nuestra pequeña Emma comienza en un viaje, una escapada en plena pandemia del 2020 a las hermosas playas de Tulum. En donde un poco de ginebra y romance dieron lugar a lo más hermoso que nos ha pasado en la vida.
Somos Michel y Luis y una tormenta el 8 de agosto de 2021 nos hizo comenzar nuestros relatos de viajando con bebé.
La mañana era soleada, era un Domingo social ya que los abuelos (los papás de Luis) vendrían a visitarnos, a quien quiero engañar venían a visitar a Emma jajaja, y ella como nosotros siempre disfrutamos de su visita.
Antes de continuar y para hacer más amena esta lectura vamos a ajustar el nombre de los personajes: Luis ahora será llamado «Papá», Michel será llamada «Mamacita» y Emma por mucho que se oponga el público será llamada «Conki» (algún día les contaré el motivo)
Bien, papá se encontraba prendido a la computadora,, que es una de sus actividades favoritas, cuando de pronto «PUM» su equipo se apagó de golpe, afortunadamente había terminado de poner su último anuncio en Facebook para WID (su nuevo negocio que algún día les platicaré) y sin profundizar mucho que en México los cortes de energía son algo normal esto podría ser algo de 5 minutos.
Que equivocado estaba papá
«Conki» y «Mamacita» ya estaban preparándose para la llegada de los abuelos y esto nos mantuvo entretenidos sin percatarnos de que las horas pasaron y la energía eléctrica no regresó.
Después de varios intentos fallidos por arreglar la luz llegó el momento de tomar una decisión:
- Aguantamos la noche sin energía, disfrutando del poderoso calor de la Ciudad de Mérida.
- Tomamos lo necesario para pasar la noche en algún hotel cercano (lindo y de buen precio)
Decisión unánime, ¡nos vamos a un hotel!
Después de hacer una revisión rápida por una página de reservas en línea el hotel elegido fue: El mesón de la luna
Estamos muy agradecidos con el personal de este hotel por la atención que nos brindaron, aún cuando nuestra llegada fue a las 9:00 pm, fueron muy atentos y serviciales.
Sin embargo como papás, existieron algunos puntos que ha nuestro parecer podría mejorar la experiencia del hotel para el turismo familiar, y fue así como desarrollamos el BIBEROMETRO, una escala que mide en 5 puntos que tan preparado está el hotel para recibir a papás con bebés. Y los resultados para El mesón de la luna son:
🍼🍼🍼🍼 Atención al huésped.
🍼🍼🍼🍼 Limpieza y sanidad.
🍼 Espacios preparados para llegar con un bebe.
🍼🍼 Comodidad
🍼 Vistas memorables
Promedio: 🍼🍼🍼
Y aunque ese trágico/feliz domingo terminó así, nuestra aventura apenas comenzaba, y es que la luz no regresó y el electricista tampoco 🤣🤣🤣🤣
Después del desayuno familiar optamos por cambiarnos de hotel: ¿Quieres saber dónde pasamos la siguiente noche?
Nota relacionada: Nos vamos, al hotel Hilton Garden Inn Mérida
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